Aunque muchos sectores han visto cómo sus mundos se han transformado radicalmente este año, el sector en línea se ha mantenido más o menos inmune a las ondas expansivas de la pandemia. De hecho, la mayoría de las plataformas de entretenimiento basadas en la web han experimentado un auge gracias a los millones de personas que decidieron quedarse en casa y darse un atracón de sus películas y música favoritas durante el autoaislamiento.
Twitch es un claro ejemplo de este aumento drástico de las plataformas en línea durante la pandemia mundial. Una de las plataformas de juegos y streaming más populares del mundo, con casi 4.000 millones de emisoras únicas que aportan contenido las 24 horas del día, los 7 días de la semana, batió un nuevo récord en abril con 1.650 millones de horas de visionado de contenido en un solo mes. Este aumento de las horas de visionado se ha extendido por todo el modelo de negocio de Twitch, ya que creadores de contenido de todo tipo acuden en masa a la plataforma para mostrar sus ideas.
Pero a medida que Twitch y otras plataformas siguen aprendiendo, con el aumento del éxito y el rápido crecimiento aumenta el riesgo de uso indebido de la plataforma. En respuesta, Twitch se ha unido a YouTube y a otras plataformas para endurecer sus políticas de derechos de autor y ha actualizado su página de directrices de la comunidad para subrayar que está estrictamente prohibido transmitir cualquier música sin el derecho a hacerlo. Ahora se indica específicamente que los creadores no están autorizados a subir programas de radio con música, sesiones de DJ, actuaciones de karaoke, actuaciones de sincronización labial, actuaciones de versiones de canciones o incluso las representaciones visuales populares de música sin obtener los permisos adecuados.
Por muy molestos que estén los usuarios de Twitch con este cambio, el hecho es que los derechos de autor musicales mundiales son cada vez más complicados a medida que cada mes entran en el mercado nuevas plataformas de streaming. Para algunos usuarios, los derechos de autor son de poca o ninguna importancia. Simplemente transmiten música original sin preocuparse por las implicaciones morales (¿es correcto hacerlo?) o legales (¿es legal hacerlo?) de sus decisiones.
Pero las leyes de derechos de autor de todo tipo están en vigor para proteger a los creadores y artistas que trabajan en todos los medios, desde la música hasta la fotografía y la danza. Están diseñadas para garantizar que los creadores puedan ser recompensados plena y adecuadamente por los años de duro trabajo, perseverancia y talento que han dedicado a su arte. Y aunque la cantidad de dinero que un creador recibe por que usted escuche su canción favorita en la intimidad de su propia casa puede ser pequeña, cuando se multiplica millones de veces a través de una plataforma como Twitch, los impactos son mayores. La protección de los derechos de autor es fundamental para la creación continua de las imágenes, los sonidos y las experiencias que hacen que nuestras vidas sean tan ricas como lo son.
Como servicio de transmisión de sonido de élite, SoundMachine garantiza que los creadores sean compensados justamente por su arte. Cumplimos plenamente con las leyes internacionales de derechos de autor de la música para que pueda escuchar la música que le gusta en su oficina, espacio comercial o restaurante sabiendo que los derechos de los artistas están totalmente protegidos. Estos derechos no cubren los espectáculos en directo ni los DJ, pero sí cubren los que el gerente de una cafetería necesita para importar sus listas de reproducción favoritas de Spotify. De este modo, puede disfrutar de la música sin preocuparse de que un día lleguen a su mesa reclamaciones por derechos de autor o de que un agente de ASCAP, BMI, SESAC o GMR se presente en su puerta para hablar de la compensación.